NESTLÉ - NAN SUPREME 1 (+0M, 800 G)

NESTLÉ - NAN SUPREME 1 (+0M, 800 G)

Indicaciones

Substituye a la leche materna cuando esa no es posible, desde el nacimiento hasta los 6 meses.

Ingredientes

Azúcares añadidos (lactosa), aceites vegetales (girasol alto oleico, coco, canola y girasol), concentrado de proteína de suero de leche parcialmente hidrolizada enzimáticamente, HMO 1,6% (2'-O-fucosillactosa, difucosilactosa, lacto-N-tetraosa, 6'-sialilactosa, 3'-sialilactosa), glicerofosfato de calcio, fosfato hidrogenado de calcio, cloruro de magnesio, cloruro de calcio, L-arginina, aceite de pescado 0,2% (DHA), ácido cítrico, aceite de Mortierella alpina 0,1% (ARA), L-histidina, bitartrato de colina, Cloruro de potasio, vitamina C (Ác. ascórbico), L-tirosina, tripsina, taurina, inositol, sulfato ferroso, sulfato de zinc, L-carnitina, citidina 5'-monofosfato (CMP), vitamina B5 (pantotenato de calcio), uridina 5'-monofosfato (UMP), vitamina B3 (niacina), vitamina E (DL-alfa tocoferol), adenosina 5'-monofosfato (AMP), cultivos probióticos de Bifidobacterium lactis (0,003%), sulfato de cobre, guanosina 5'-monofosfato (GMP), vitamina B2 (riboflavina), vitamina A (acetato de retinol), vitamina B1 (tiamina), vitamina B6 (piridoxina), sulfato de manganeso, yoduro de potasio, vitamina B9 (ácido fólico), vitamina K1 (fitomenadiona), selenato de sodio, biotina (H), vitamina D3 (colecalciferol) y vitamina B12 (cianocobalamina). CONTIENE LECHE Y ACEITE DE PESCADO. 

La lista completa de ingredientes puede sufrir variaciones por parte del fabricante.

Modo de empleo

• Optar por el uso de agua mineral y hervirla hasta que alcance 40º.
• Echar la cantidad dosificada e indicada del polvo en el biberón
• Añadir la mitad de agua y agitarlo.

Consejo Parafarmacia Pozas

La Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia materna.

La lactancia materna es el medio ideal de nutrir a su bebé y de protegerle contra las enfermedades.

Debería evitarse la introducción superflua de la alimentación parcial con biberón u otros alimentos y bebidas, debido a su efecto negativo sobre la lactancia. 

Asimismo, debería advertirse a las madres de la dificultad de desistirse después de haber decidido no iniciar o interrumpir la lactancia al seno.

Antes de utilizar una fórmula infantil, las madres deberían ser informadas de las consecuencias sociales y económicas de dicha decisión; por ejemplo, si el bebé está alimentado exclusivamente con biberón, necesitará más de una lata (450 g) por semana; así pues, hay que tener en cuenta la situación familiar y económica.

Habría que recordar a las madres que la leche materna no sólo es el mejor alimento para bebés sino que también es el más económico.

Si se decide utilizar una fórmula infantil, es importante darles las instrucciones necesarias para su correcta utilización y llamarles la atención sobre el hecho de que el bebé puede enfermar si no se hierve el agua, no esteriliza el biberón o no se reconstituye el producto correctamente.